Historia de Tesalia, Grecia


Tesalia es una región histórica de la Antigua Grecia situada en la región oriental del país que, aunque considerada parte de la comunidad helénica, siempre permaneció un poco apartada del desarrollo cultural griego. Constituía un importante lugar de paso entre Grecia y el continente.

Los antiguos geográfos dividían la región en cuatro partes. Se asentaba en una amplia llanura rodeada por altas montañas que se suponían escenarios de numerosos mitos, Ossa, Pelión y sobre todo el Olimpo, sede de la asamblea de los dioses. Este último macizo la separaba de Macedonia y la cordillera del Pindo del Épiro, y el paso de las Termópilas era el camino natural hacia los vecinos del sur, Fócida y Beocia. La única salida al mar era la ciudad de Larisa; otras poblaciones importantes eran Thaumakoi, Farsalia y Feres, que ocupaban posiciones estratégicas en las rutas comerciales que atravesaban Grecia. La economía era básicamente agropecuaria. De todas éstas, la más importante era la antes citada Larisa, patria de Píndaro e Hipócrates, de la que se conservan un gran templo y el teatro. Feres era una importante estación termal como han demostrado las importantes obras hidráulicas sacadas a la luz por los arqueólogos. Gonnos era el nudo principal en las comunicaciones entre Macedonia y Tesalia, importancia reconocida por Filipo II, quien doto a esta última ciudad de unas murallas monumentales. La ciudad de Tríkala albergaba el más famoso santuario de los dedicados a Asclepios, recinto que competía en importancia con el oráculo existente en Pagasi.

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Historia

Tesalia poseía desde el Neolítico una población muy heterogénea, como muestran los restos pertenecientes al Heládico Antiguo y Medio. La cerámica característica de este período presentaba espirales en negro sobre un fondo rojo. La Edad del Bronce supuso el establecimiento de los micénicos en Tesalia, cuando adquirió importancia la ciudad de Yolcos con sus característicos sepulcros de cúpula micénicos. Allí se instalaron gentes originarias de Beocia durante el primer milenio, las cuales trajeron consigo el dialecto eolio, que fue el utilizado por los tesalios en todo el período antiguo. Éstos se vieron sometidos por emigrantes procedentes de Grecia occidental que impusieron su dominio en toda la región y, a partir de entonces surgió una clase social de subordinados rurales, los penestes (literalmente ‘hombres desnudos’), que en parte recordaban a los ilotas espartanos, aunque aquí dependían de los terratenientes y no al Estado. Los tesalios invadieron posteriormente los territorios de las regiones circundantes, a las que concedieron cierto grado de autonomía bajo la categoría de aliados.

En las diversas ciudades de la región se fueron estableciendo una serie de gobiernos oligárquicos, donde los grandes aristócratas propietarios de las tierras gobernaban de forma despótica, entre los cuales destacaron los Aleuadas en Larisa, los Skopadas en Krannon y los Echekrátidas en Farsalia. Estas ciudades eran independientes las unas de las otras, pero durante el siglo VI d.C. alcanzaron una cierta unidad política con la formación de una koinon (‘confederación’) que, según la tradición, fue idea de Aleuas el Rojo. La confederación estaba constituida por cuatro tetrarquías a cuya cabeza se situaba un tetrarca que, a su vez, se encontraba bajo mandato de un tagos, magistrado supremo elegido por la Asamblea ciudadana. Las cuatro tetrarquías eran Thessaliotis, con capital en Farsalia, Pelasgiotis con sede en Larisa, Hestaexotis con el gobierno en Tríkala y, por último, Phthiotie, cuyo tetrarca se asentaba en Othrys. La koinon Tesalia estaba sustentada por un potente ejército que, al contrario de lo que sucedía en el resto de Grecia, basaba su poder en la potencia de su caballería.

Durante el período arcaico, Tesalia fue una de las principales potencias griegas, como demuestra el control que ejercía sobre Delfos, el principal santuario helénico. Consiguió tener bajo su control una serie de confederaciones menores entre las que se hallaban la de los magnesios y la de los dolopes. Durante las Guerras Médicas Tesalia se situó del lado persa, lo que le valió la enemistad del resto de los griegos, quienes mandaron una expedición de castigo comandada por los espartanos que fracasó en sus intenciones; sin embargo, en la Guerra del Peloponeso se puso de lado de los atenienses.

La época clásica supuso el inicio de la decadencia de la confederación pues las ciudades, que pugnaban por su control, se vieron inmersas en frecuentes guerras, lo que llevaba muchas veces a que las magistraturas quedaran vacantes. Filipo II de Macedonia se anexionó Tesalia en el siglo IV, de cuyo reino formó parte hasta la conquista romana del 196 a.C. Los romanos reorganizaron la koinon colocando su capital en Larisa, que se convirtió en una de las principales bases del ejército de Roma en la región. Sufrió la invasión de las tropas de la liga etolia en el 192 a.C. encabezadas por Antíoco de Siria, de las que fue liberada por su aliado. Su territorio fue escenario de una batalla en las cercanías de Farsalia entre las huestes de Pompeyo y César (48 a.C.). Tesalia fue devastada durante la Edad Media por sucesivas invasiones de godos, hunos, búlgaros y eslavos. Fue conquistada por los turcos después de la batalla de Kosovo de 1384. El tratado de Berlín (1878) le concedió la independencia del Imperio Otomano para poder de esta forma unirse a la Grecia independiente, hecho que no se vio consumado hasta 1881.

Fuente: Britannica

1 pensamiento sobre “Historia de Tesalia, Grecia”

  1. Gracias por esta historia

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