Kaiserslautern


Kaiserslautern es una ciudad de Alemania, perteneciente al estado federado (Land) de Renania-Palatinado, situada al suroeste del país, en las inmediaciones de la reserva natural de la Selva de Pfälzer.

Historia

Los numerosos restos encontrados en los alrededores de la ciudad permiten afirmar que la presencia humana en la zona se remonta a los años 6000-5000 a.C. A partir del año 1200 a.C. hay datos fidedignos de un asentamiento de población en las laderas del oeste de la ciudad. Sin embargo, la consolidación de esta zona como lugar elegido para establecer una civilización empezó en el año 250 a.C. cuando la civilización romana creó una urbe que pronto se convirtió en importante centro comercial. El desarrollo de la villa iba a ser rápido ya que en el año 370 una gran cantidad de refugiados céltico-romanos se establecieron en la zona.

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Aparece mencionada por primera vez en documentos históricos en el año 830, concretamente en el Real Condado de Lutra, si bien, su fundación parece ser que data del año 622, durante el reinado de Dagoberto I de la dinastía merovingia. La concesión de los derechos de gran mercado, así como los de aduana y la jurisdicción civil por parte del emperador Otto III en el 985 marcó el inicio de la decadencia demográfica y económica de la ciudad. Además a partir de este momento Lautern se convirtió en un lugar atractivo para la mayoría de los emperadores germanos. De hecho, en 1152 el emperador Federico I Barbarroja inició la construcción de un palacio al que se trasladó tras su finalización en 1158. El que la ciudad fuera residencia del emperador hizo que durante siglos fuera conocida como la “ciudad de Barbarroja”. Además del palacio mandó construir el primer hospital de la villa, en el año 1186.

Noventa años más tarde se le concedieron a Kaiserslautern los estatutos de ciudad por el rey Rudolf von Habsburg. Fue en esta época de expansión en la que se construyó la iglesia de la Colegiata, la catedral de la ciudad. Desde ese momento el máximo interés de los mandatarios locales, tanto eclesiásticos como seculares, fue dotar a la ciudad de una total seguridad. De esta manera entre los años 1300 y 1340 se construyó la muralla que rodea la ciudad.

En la segunda mitad del siglo XVI Kaiserslautern sufre un importante cambio con la llegada del conde del Palatinado Johan Casimir. En el año 1569 dicho conde decidió construir un palacio renacentista sobre el antiguo palacio de Barbarroja y trasladar su residencia a la ciudad cuando se terminaron las obras en 1571.

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A lo largo del siglo XVI la ciudad estuvo marcada por la Guerra de los Treinta Años. Durante este conflicto bélico fue asaltada sucesivamente por tropas españolas, suecas y francesas. Aunque las que mayor destrucción provocaron fueron las huestes croatas que acabaron con gran parte de la zona medieval de la ciudad en el año 1635. Cuando Kaiserslautern aún apenas se había recuperado de las heridas sufridas, a inicios del siglo XVIII, en 1703, volvió a ser asolada por los soldados franceses.

En el año 1801, Napoleón dictó que la ciudad iba a ser una de las subprefacturas del imperio galo. Tras el dominio de Bonaparte la villa pasó, al igual que todo el Palatinado, a formar parte del estado de Baviera. Al igual que toda Europa la ciudad vivió los periodos de las revoluciones liberales de mitad de siglo. De esta manera entre 1843 y 1846 se construyó el edificio de Fruchthalle en el que se reuniría la asamblea del gobierno revolucionario del Palatinado (1849). En esta misma época se inició la construcción de la línea de ferrocarril Rin-Saar, entre Ludwigshafen y Bexbach vía Kaiserslautern.

Ya adentrados en el siglo XX la ciudad sufre de nuevo los horrores de la guerra especialmente durante la Segunda Guerra Mundial. En el año 1944 más del 60% de Kaiserslautern fue destruida por los bombardeos de las tropas aliadas en su ofensiva contra Hitler.

Tras la Segunda Guerra Mundial entre 1950 y 1955 Kaiserslautern se convirtió en la más grande comunidad militar estadounidense fuera de su país. En la actualidad la base aérea de Ramstein asienta los cuarteles generales de fuerzas aéreas de Estados Unidos en Europa (USAFE), la central de las fuerzas aéreas aliadas de Europa (AIRCENT), así como la octoagésimo sexta división aérea. En el suburbio de Vogelweh habitan más de 10.000 soldados estadounidenses, mientras que en el conjunto de la ciudad residen cerca de 38.000 norteamericanos. Las relaciones entre Kaiserslautern y los Estados Unidos están profundamente enraizadas en la historia, ya que una gran cantidad de emigrantes germanos abandonaron su ciudad natal entre los siglos XVII y XX bien por motivos políticos bien por causas económicas para instalarse en Estados Unidos, especialmente en Pennsylvania.

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Patrimonio Artístico

La joya del patrimonio artístico de la ciudad es el Castillo Hohennecken que se encuentra a menos de una hora a pie desde el barrio de Vogelweh, y pese a que en la ciudad se le llama palacio en realidad es una fortaleza. Los vestigios arqueológicos (en forma de sarcófago encontrado en 1895) en el alto de la montaña donde fue construido el castillo evidencian el pasado romano de la ciudad. Con la caída del imperio romano se abandonó esta zona durante muchos siglos, y hasta la elección del emperador Federico I Barbarroja en 1152 no se comenzó a fortificar el Palatinado. La construcción del castillo, la más grande de todas las fortalezas construidas para defender el territorio de Barbarroja, no se concluyó hasta el 1210. La familia Hohenecken que se había extinguido por más de un siglo, fortificó el castillo en 1560. En 1688 las tropas francesas invadieron la ciudad siguiendo una política de tierras quemadas ocuparon el castillo y los explotaron con cargas de pólvora. Nunca fue restaurado tras su destrucción.

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Economía

La afinidad que se ha establecido entre Kaiserslautern y Estados Unidos en estos últimos cincuenta años se ha reflejado de manera directa en la economía de la ciudad. Así pues, un gran número de empresas norteamericanas han decidido establecer en esta ciudad alemana sus filiales en Europa, ejemplo de ello es la presencia de Coca-Cola, Spectra Precisión, Saginaw, TRW United Carr, Lear Corp o ALSCO. La comunidad norteamericana aporta gran cantidad de divisas a la economía de Kaiserslautern ya que han formado una pequeña ciudad dentro de la misma en la que el comercio se ha desarrollado extraordinariamente. Incluso se ha creado un Club de Negocios Americano-Alemán que sirve de punto de contacto a las empresas estadounidenses que llegan de nuevas para establecer filiales en Alemania. La finalidad de dicho club es ofrecer a las empresas la oportunidad de conocer las posibilidades de explotación del mercado germano

Kaiserslautern se encuentra situada geográficamente en el corazón de un mercado que abastece a 345 millones de personas, puesto que la región disfruta de una localización central en Europa. En un radio de 100 kilómetros este área incluye los mercados germanos de Frankfurt, Wiesbaden, Coblenza, Trier, Saarbrücken, Mannheim y Karlsruhe, los mercados franceses de Estrasburgo y Metz, así como el mercado de Luxemburgo.

El aeropuerto de carga más grande de Europa, el aeropuerto internacional de Frankfurt está situado en las proximidades de Kaiserslautern, lo que facilita el tránsito comercial de la ciudad. Otros aeropuertos comerciales están establecidos en Saarbrücken y Luxemburgo lo que permite a la ciudad un importante flujo de tráfico de mercancías. Al tiempo que el uso potencial de la base aérea de Ramstein dota a la ciudad de una gran agilidad para la recepción y transporte de pasajeros. Además Kaiserslautern cuenta con magníficas comunicaciones por carretera.

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