Jack el Destripador


jack el destripador 3

Existe un gran dilema sobre quien era realmente Jack,….. ciertos retratos apuntan a que esta pudiera ser su cara.

Fue un asesino de mujeres que durante tres meses sembró el terror en la zona este de Londres (Inglaterra) en 1888. Apodado Jack el Destripador, se le atribuyeron siete muertes, aunque algunos investigadores oficiales elevaron la cifra a ocho e incluso más.

Nunca fue posible su detención.

jack el destripadorEl primer asesinato tuvo lugar el 7 de agosto y el último el 9 de noviembre. Todos presentaban las mismas características: las víctimas eran prostitutas y, a excepción de la última, Marie Kelly, fueron asesinadas en calles o callejones oscuros a medianoche. Los asesinatos ocurrieron en una zona de 2,6 km2, que comprendía Whitechapel, Stepney y la City de Londres. Las víctimas murieron del mismo modo, cortándoles el cuello con un cuchillo muy afilado, posiblemente un escalpelo, y todas ellas presentaban diferentes grados de mutilaciones en el cuerpo. En algunos casos, sus órganos habían sido extirpados con una gran precisión profesional.

Las cinco víctimas de Jack (aunque algunos estudiosos apuntan a que pudieron ser más) son:

  • Mary Ann Nichols , nacida un 26 de agosto de 1845 y asesinada el viernes 31 de agosto de 1888 en Buck’s Row. Degollada, con signos de estrangulación total o parcial y una gran herida en el abdomen. Su ropa estaba colocada por encima de la cintura y la parte inferior del tronco quedaba expuesta, mostrando los genitales y el abdomen.
  • Annie Chapman , nacida en septiembre de 1841 y asesinada el sábado 8 de septiembre de 1888 en el patio trasero del número 29 de Hanbury Street. Degollada, con signos de estrangulación y destripada; el asesino se llevó su útero como trofeo mostrando en su extirpación conocimientos anatómicos de la pelvis femenina y habilidad en el uso del cuchillo.
  • Elizabeth Stride , nacida en Suecia el 27 de noviembre de 1843 y asesinada el domingo 30 septiembre de 1888 en la parte trasera del número 40 de Berner Street-Dutfield’s Yard. Degollada y con posibles signos de estrangulamiento, pero sin mutilaciones. Aun sangraba por la garganta cuando fue descubierta.
  • Catherine Eddowes , nacida el 14 de abril de 1842 y asesinada el domingo 30 de septiembre de 1888 apareció en Mitre Square. Degollada y severamente mutilada en cara y abdomen, le extirparon el útero-sin habilidad esta vez- y el riñón izquierdo, éste sí cuidadosamente extraído, según la autopsia.
  • Mary Jane Kelly , nacida en 1863 y asesinada el viernes 9 de noviembre de 1888 en su habitación número 13 de Miller’s Court, un patio de vecinos accesible desde Dorset Street. Encontraron lo que quedaba de su cuerpo sobre su cama, con sus vísceras abdominales diseminadas por toda la cama y sobre una mesa. Su hígado y senos habían sido extirpados; sus orejas, cercenadas, igual que su nariz, y sus riñones, extraídos con precisión. El corazón jamás fue encontrado.

jack mapa Whitechapel  

A pesar de la intensa búsqueda de Scotland Yard, jamás se llegó a descubrir la verdadera identidad de Jack el Destripador o, al menos, las autoridades británicas nunca la revelaron. Con el paso de los años gran número de investigadores profesionales y aficionados expusieron diversas hipótesis. Entre los principales sospechosos se encontraban: el príncipe Albert Victor, duque de Clarence, hijo mayor del príncipe de Gales (posteriormente, Eduardo VII) y segundo en la línea de sucesión al trono británico, quien desde su nacimiento en 1864 hasta su muerte, en 1892, sufrió de demencia; sir William Gull, médico personal de la reina Victoria; James K. Stephen, tutor del príncipe Albert Victor en la Universidad de Cambridge; Montague John Druitt, un abogado loco cuyo cuerpo fue hallado flotando en el río Támesis poco después del último asesinato; el doctor Neill Cream, condenado por asesinato, famoso por su afirmación “Yo soy Jack el …” en el momento de ser ahorcado; Nathan Kaminsky, un judío polaco que murió de sífilis en un manicomio en 1889; y James T. Maybrick, comerciante demente de Liverpool que murió en 1889 asesinado por su mujer.

Otro de los aspectos más interesantes del caso es el de las cartas , presuntamente del asesino, recibidas por la policía o los medios de comunicación y que le sirvieron para acuñar un «nom de guerre». De hecho, antes del doble evento, el asesino ya fue conocido como «Delantal de Cuero» (Leather Apron) tras las declaraciones de algunas prostitutas sobre un agresor habitual y el delantal que se encontró en el patio dónde apareció el cadáver de Dark Annie.

El 29 de septiembre llegó a Scotland Yard una misiva que, dos días antes, había sido recibida por la Agencia Central de Noticias (Central News) de Londres, fechada el 25 de septiembre y escrita con tinta roja. Tanto sus primeras palabras «Dear Boss» (que le han el dado nombre a esta carta, que actualmente se conserva en el Museo Negro de Scotland Yard) como su firma, que han tenido mucho que ver con la leyenda por la que este crimen ha pasado a la historia; han sido usadas como un símbolo de los crímenes, a pesar de que actualmente no se considera que fuera enviada por el asesino, sino que se le atribuye a unos emprendedores periodistas.

La policía cometió el error de publicar reproducciones de la carta, en panfletos y en los periódicos, esperando que alguien reconociese la caligrafía y pudiese aportar alguna pista sobre el asesino, con tres consecuencias a cual peor; se extendió el clima de terror, se recibieron centenares de cartas semejantes y se asumió que las cartas las había enviado el asesino, con todo lo que ello podía significar.

El lunes, tras la noche del sábado en la que ocurrieron las muertes de Elizabeth Stride y Kate Eddowes, se recibió en la Central News una tarjeta postal, con la misma caligrafía de la carta, y conocida como «Saucy Jacky» en la que se hacía referencia tanto al doble evento, como a la carta previa «Dear Boss». Ambas piezas se consideran mayoritariamente hoy por los investigadores, la obra maestra, cuidadosamente manuscrita por un «emprendedor reportero» y cuyo guión procedería, precisamente, del Jefe de la Agencia Central News.

La carta con los máximos visos de verosimilitud fue la que llegó, en una caja de cartón, el 16 de octubre al empresario George Lusk, presidente del Comité de Vigilancia de Whitechapel, formado por ciudadanos que patrullaban las calles en ayuda de las fuerzas policiales. El paquete de cartón contenía, también, la mitad de un riñón humano conservado en destilados y según la carta adjunta, remitida «desde el infierno», el resto de la víscera se lo había comido frito el autor de la carta que, de manera llamativa, no la firmaba Jack The Ripper.

1 pensamiento sobre “Jack el Destripador”

Deja un comentario